Los equipos misioneros que están disputando el Federal A 2025 terminaron sin goles en un partido muy esperado. Se volvieron a encontrar después de nueve fechas y la realidad fue otra: los de “Pico” Salinas no pudieron imponerse con holgura (como en la primera fecha, con el 3-1) y los de “Toti” Arias se mostraron más convincentes durante buena parte del encuentro.
Desde el análisis, podemos encontrar una respuesta en el buen funcionamiento de la última línea “colectivera”. El DT dispuso tres centrales (Aguilar-Arias-Marcucci) para tomar a la delantera de “9” pivots Estigarribia-Valsangiácomo; dos hacían la marca hombre a hombre y el tercero quedaba libre. Mientras tanto, por los costados Domínguez y Canzoniero iban y venían, armando la línea de 5 en la fase defensiva y sumándose como laterales-volantes a la hora de la progresión ofensiva.

El plan resultó en gran parte del partido. Tanto es así que promediando el complemento Salinas decidió cambiar a los dos delanteros.
Mitre, en contrapartida, diseñó su andamiaje a partir de un doble 5 conformado por Morales y Caballero. Ambos iniciaban su posicionamiento detrás de la mitad de la cancha, se distribuían los pasillos centrales y allí intentaban recuperar la pelota. Al principio Caballero se adelantaba unos metros con la posesión a favor e intentaba enlazar, aunque con poca profundidad; por eso en el complemento fue Morales quien tomó ese rol, llevándolo mejor con más dinámica y distribución.
A los costados, “Chucky” Esquivel y Melgarejo eran los encargados de darle amplitud al equipo, pero pocas veces pudieron empujar con centros punzantes o romper con diagonales para sumar un tercer hombre arriba.

Los locales buscaban lastimar con posesiones alternadas con ataques directos, pero eran neutralizados correctamente. En cambio, Crucero fue más vertical, sobre todo jugando de izquierda a derecha para González o Soto; por allí encontró algunos espacios con avances rápidos y generó un par de situaciones peligrosas en los primeros minutos (Bachke sacó un pelotazo de Santa Cruz y un cabezazo de Mariani).
En ese contexto el juego tuvo dinámica, fue entretenido y trabado. Mitre recién inquietó sobre el cierre del primer tiempo con un cabezazo de Medeiro en un corner y una muy buena acción de Valsangiácomo aguantando de espaldas y soltando para Estigarribia, acción que terminó en un atajadón espectacular de Colli.
Pero el ritmo fue decayendo en el segundo tiempo, producto del desgaste que produjo una cancha pesada por las lluvias que habían caído (aunque el campo de juego drenó el agua muy bien).

Los visitantes tuvieron un buen arranque del complemento, con un poco más de posesión y un cabezazo de Mariani que pasó muy cerca. Aunque Mitre contó con la más clara del partido: a los 23’ Melgarejo ejecutó un penal cruzado junto al palo izquierdo, Colli leyó el remate y lo contuvo.
Para ese entonces, la dupla Silveira-Donato había reemplazado a los dos “9” iniciales. Pero su arranque furibundo (que generó el penal) se diluyó pronto y no crearon mayores inconvenientes.

El tiempo discurrió y todo terminó en 0. Fue un partido que en que hubo opciones de gol, pero las pocas intervenciones de los arqueros fueron claves para evitarlo. Ambos se jugaban mucho, intentando arrancar la segunda ronda de la primera fase de la mejor manera para la recta final.
En líneas generales, pareciera que Crucero hizo un mejor negocio, sobre todo porque mejoró la imagen que había dejado en el encuentro inicial contra Mitre. Los «auriazules», por su lado, mostraron cierta irregularidad en el juego y dejaron escapar dos puntos en casa.
Todavía queda camino por recorrer y habrá que ver quién llegar mejor a la meta final.
